29 de septiembre de 2012

Bombardeo de mensajes que no son



Me quiere mucho, poquito, nada.
Te dije todo lo que estaba sintiendo, te hice ver que quería estar contigo y te dije que no quería reprimir más lo que sentía hacia ti.  Fuiste tan diferente. Tomaste de mi mano, me dijiste que comprendías todo y que efectivamente, estábamos siendo dejados en nuestra relación, que me querías y que querías estar conmigo.

Yo sentía que todo había sido tan simple, estaba feliz, sin dudarlo un poco. Salíamos de paseo, corríamos por un parque, no sé por qué ese cuadro tan romántico que no es pertinente a nosotros, que en realidad, no es como nosotros.


Tu pelo estaba mucho más largo y rizado, traías puesto anteojos y tenías la piel mucho más blanca. Parecías otra persona pero eras tú y yo estaba realmente feliz, era que estaba contigo y me sentía parte de tu vida, contaba contigo y tú conmigo, nos complementábamos y lo sabíamos, estábamos bien, todo estaba bien, pero realmente, no eras tú; era otra persona.




No hay comentarios:

Publicar un comentario