9 de febrero de 2010
Sin nombre
Anoche mi hermano me fue a buscar a la universidad, yo estaba con mi ex compañera de colegio PR, ella alguna vez fue tan importante en mi vida, pero me falló…en el momento que mas la necesité me falló.
Cuando nos fuimos yo me senté cerca de la farmacia y mi hermano cerca del paradero se fumaba un cigarrillo, yo pensando que lo iba a terminar, lo tiró, apagó e hizo parar la micro que nos llevaba a no sé donde. El se subió y yo corrí para seguirlo, pero la micro avanzó sin mi:
- Dile que pare por favor
- Le dije, pero no lo hace.
Yo golpeaba la micro esperando que me escucharan y así poder subir, pero nada. No sé en qué momento se detuvo y yo pude subir. ¿Era una broma?
Al estar en la micro no había ningún asiento para dos, me senté aparte y el señor que iba adelante preguntaba cómo llegar a una calle de Santiago Centro. Nosotros estábamos cerca de Plaza Egaña ( no sé por qué estábamos ahí)
- ¿cómo llego a Santiago Centro?
- Caballero siga en esta micro y lo va a dejar en Los Héroes o Moneda por ahí, no se baje en el metro porque tendrá que hacer combinación y la micro lo deja directamente.
En la micro había una cabeza que me miraba, si! Una cabeza! El señor cabeza. Así que le pedí a mamá que se ponga a mi lado para no verlo. No es nada normal ver una cabeza en la micro. (Cabeza sin un cuerpo)
Llegamos, no sé a dónde, estaba en una pieza pequeña y tenía dos partes de Mc. Era ella pero no lo era. Era su cuerpo y su alma, no lo sé, y no estaba. Tomé un arma y le disparé unas cuatro veces a cada parte, con el dolor que me provocaba. Me arrepentía por un instante, por su madre, su familia… tenía tanto miedo, pero me tranquilizaba el saber que en alguna parte estaba viva, porque no la maté a ella, maté una parte de ella.
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Hola como estas?, jejeje encontré tu blog por ahi, por ahí, jaja asi que me pasé a leerte, me gustó, asi que leeré mas, te dejo un beso, y estamos al habla, cuidate, bye*
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